Ellen Vandyck
Director de Investigación
La tendinopatía de Aquiles es una afección caracterizada por un periodo prolongado de síntomas que pueden afectar a la calidad de vida de la persona y a su capacidad para practicar deportes o realizar actividades físicas. A pesar de que la rehabilitación basada en el ejercicio es la opción a la que se recurre, muchas personas siguen teniendo síntomas cuando interrumpen la rehabilitación. En este sentido, suele pensarse en ofrecer una terapia de ejercicios combinada con educación sobre el dolor para que el individuo aprenda sobre su enfermedad. El modelo biopsicosocial está ampliamente incorporado en la rehabilitación y la investigación, pero a menudo se le achaca el olvido de la parte "bio". En este estudio, los autores trataron de comparar la educación sobre el dolor impartida mediante una explicación biopsicosocial frente a la educación patoanatómica, más orientada a la biomedicina, en los resultados de dolor y función.
Este estudio buscaba saber si es importante cómo se explica la tendinopatía de Aquiles a un paciente. Por ello, compararon a participantes con tendinopatía crónica del tendón de Aquiles que participaban en un programa de ejercicios y fueron asignados aleatoriamente a recibir además una explicación biopsicosocial o biomédica del dolor. El objetivo primario era comparar la diferencia en el dolor y los resultados funcionales a las 8 semanas.
Tanto las personas con tendinopatía de Aquiles de porción media como de inserción podían incluirse cuando el tendón de Aquiles era la principal localización del dolor. Los síntomas debían ser provocados por actividades en las que se soportara peso y aumentar hasta al menos 3/10 al caminar, elevar los talones o saltar.
Los participantes se inscribieron en un programa de ejercicios durante 7 semanas en el que recibieron de 6 a 7 sesiones supervisadas de 30 minutos. La primera sesión tuvo una duración de 45 minutos. Aquellos con dolor agravado durante la dorsiflexión del tobillo recibieron elevaciones adicionales del talón. Durante el segundo periodo, entre 9 y 12 semanas, se instruyó a los participantes para que realizaran ejercicios en casa.
La única diferencia entre los grupos era el contenido del programa educativo. La explicación biopsicosocial se basaba en contenidos seleccionados, pero hacía hincapié en una perspectiva biopsicosocial de la neurofisiología del dolor. Además, abordó el impacto de la catastrofización del dolor y la kinesiofobia. Promueve la actividad física para mejorar el dolor y crear efectos duraderos. Los participantes que recibieron la explicación biomédica de la tendinopatía de Aquiles aprendieron sobre la fisiopatología de la afección y las fuentes biomédicas del dolor. Además, tuvieron que aplicar los conocimientos durante su participación en el programa de carga de tendones. Al igual que en el otro grupo, el programa promovía la participación en el ejercicio como medio para mejorar la salud física general.
¿En qué consistía el programa de ejercicios? Para ambos grupos se llevó a cabo el mismo programa. En la fase 1, el programa se centró en ejercicios isométricos. Las fases 2 y 3 se centraron en la elevación del talón y en la función de resorte del tendón de Aquiles, respectivamente. Las progresiones se realizaron en función del tiempo y de criterios predeterminados basados en los síntomas y en la capacidad para completar los ejercicios, como se muestra a continuación.
Dado que en el ECA se incluyeron tanto participantes con tendinopatía media de Aquiles como con tendinopatía insercional de Aquiles, las elevaciones de talón se estandarizaron para que se realizaran en terreno llano sin fase de declive. Se animó a los participantes a realizar ejercicio recreativo y a aumentarlo gradualmente con el paso de las semanas. Para ello, se introdujeron modificaciones para minimizar el agravamiento de su dolor durante la participación en actividades recreativas. Ejemplos de modificaciones fueron las elevaciones de talón, longitudes de zancada más cortas y alteración de la duración de la actividad.
Las medidas de resultado se obtuvieron al inicio y en la variable principal de 8 semanas. Se realizó un seguimiento a las 12 semanas. Se evaluaron un total de 5 ámbitos:
En este ECA se incluyeron 66 participantes con tendinopatía crónica del tendón de Aquiles. Sufrieron tendinopatía del tendón de Aquiles durante una media de 14 a 18 meses en los grupos de educación biopsicosocial y educación biomédica, respectivamente. En ambos grupos, el número de personas afectadas por tendinopatía insercional del tendón de Aquiles era ligeramente superior. Por término medio, habían acudido a 2 proveedores, la mayoría de los cuales eran fisioterapeutas. Probaron una media de 5 tratamientos. Más del 60% de ellos probaron previamente el refuerzo. Parece una población bastante resistente a la terapia.
Los grupos estaban bien equilibrados al inicio, excepto en el trabajo de elevación de talones y la altura de salto. El trabajo de elevación del talón se cuantificó como la suma del cambio en la altura del tobillo por el peso corporal para el número máximo de elevaciones del talón (n) que fueron capaces de completar. En el grupo que recibió la educación biopsicosocial, esta media fue de 619 Nm, pero en el grupo que recibió la educación de orientación biomédica, esta media fue de 834 Nm. La altura del lúpulo al inicio del estudio era unos 4 centímetros menor en el grupo que recibió educación biomédica.
A las ocho semanas, la formación biopsicosocial en ciencias del dolor no fue más eficaz que la formación de orientación biomédica. En ambos grupos se observaron mejoras similares en el dolor provocado por el movimiento, sin que se apreciara superioridad de uno sobre otro. De media, se observó una reducción de 3 puntos desde el inicio hasta la semana 8.
La función, medida con el PROMIS Physical Function, no aumentó con el tiempo.
Ambos grupos consiguieron mejorar su número máximo de elevaciones de talón con el tiempo, de nuevo sin que un grupo fuera superior al otro.
El nivel declarado de kinesiofobia disminuyó a lo largo del estudio en ambos grupos y esta mejoría se mantuvo a las 12 semanas. No se observaron mejoras en la modulación condicionada del dolor medida con el PPT.
Este estudio investigó el efecto de la educación sobre el dolor impartida mediante una explicación biopsicosocial frente a la educación patoanatómica sobre los resultados del dolor y la función. La educación sobre el dolor se integró en un programa de ejercicios. De los resultados se desprende que no importa cómo explique la tendinopatía de Aquiles a su paciente. A las ocho semanas, ni la educación centrada en la biomedicina ni la educación en la ciencia biopsicosocial del dolor fueron más beneficiosas. Se observaron reducciones similares en el dolor provocado por el movimiento en ambos grupos, sin que hubiera un claro favorecimiento de un grupo sobre el otro. Entre el inicio y la semana 8, se observó un descenso medio de 3 puntos.
Referencia adicional
Tanto si trabaja con deportistas de alto nivel como con aficionados, no querrá pasar por alto estos factores de riesgo que podrían exponerlos a un mayor riesgo de lesión. Este seminario web le permitirá detectar esos factores de riesgo para trabajar en ellos durante la rehabilitación.